Miras al cielo con la esperanza de encontrar respuestas. Respuestas a las preguntas que quizás ni te hallas planteado. Todo ha sido un caos estos últimos meses. Muchas subidas y bajadas. Muchas personas y pocas sinceras. Muchas sonrisas fingidas y pocas con ganas. Muchas lágrimas a solas y pocas en compañía. Han sido meses de creer hasta en lo imposible y de sentir lo increíble. De tener la rabia y el coraje a flor de piel. De impotencia. De negar tu existencia. De ocultar lo que siento. De que mis ojos marquen tu silueta y de que nada valgan mis palabras. Que se quedan vacías, tanto o igual como lo estoy yo por dentro. De hacer todo lo posible por tener tu atención y acabar más lejos. De ver la vida como un juego y yo jugar a ser la mejor jugadora. De poner las cosas claras sobre la mesa y tirar el dado para ver que careta ponerse cada mañana. De querer salir corriendo y acabar durmiendo. De querer gritar a los cuatro vientos y acabar callando por completo. De que cada suspiro no teng