Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de 2015

Tu boca mi próximo precipicio

Me he pasado la vida cayéndome y levantándome, tropezándome con piedras, chocando con paredes, resbalándome con las malas decisiones, ignorando las malas lenguas que han intentado perjudicarme. Le he dado valor a cosas visibles solo para mí, haciendo así un altar para ellas en la cima más elevada de mi corazón. También soy amante de esos recuerdos de los que nadie se acuerda, estos están en una esquinita de mi mente y les protejo de cada guerra que a querido que queden en el olvido. Me ha invadido la negatividad y la tristeza. He visto el día, el mañana, el futuro, negro, oscuro, difuminado pero siempre con la cabeza en alto...  He saltado entre nube y nube sin querer volver a la afligida realidad de la que tanto huía, teniendo todo totalmente controlado y planificando cada momento, cada segundo de mi imaginada vida. También he volado como si fuera un alma libre sin depender de nada ni nadie, me he creído una arisca vagando por el mundo, creando muros duros difíciles de romper para que

¿Azúcar o Sal? Amor y felicidad. Desprecio y desesperación.

A veces el amor puede ser la pizca de azúcar que necesitamos para vivir y reír o el toque de sal que nos hace volver a la realidad. Debe de ser ambas por igual, donde amar con locura sea primordial antes que amar con frialdad. Donde la sinceridad abunde y no haya hueco para mentir con piedad. El amor es transparente, no exige, no obliga tan solo dispone de cuanto tiene y es entregado con el llamado "ticket" sin poder ser devuelto a su dueño una vez que este lo dé todo de sí . Porque el amor una vez entregado no se puede exigir que vuelva, ya que ese sentimiento ya no es el mismo, no es igual. Cambio al igual que nosotros. Y es que hablar de amor es hablar de uno mismo. El amor no es nada sin un todo, sin detalles que marcan un antes y un después, sin sonrisas que se clavan en nuestro pensamiento, sin recuerdos que se meten en nuestro corazón, sin miradas que piden a gritos un beso de esos de los que no son olvidados jamás. Y es que hay que estar o muy enamorado o con el co

Cartas del pasado envueltas en olvido

Y hoy vengo a escribirte lo que no he podido decirte. Escribir en una carta las palabras con las que no me atreví a declararme ante ti. Dicen que las personas siempre vuelven a donde un día amo la vida y quizás esa es la respuesta de porque siempre vuelvo a ti. Hemos tenido tantas subidas como  bajadas pero esas bajadas nunca fueron el descenso que acabo con nosotros sino todo lo contrario. Superamos mil y  una barrera juntos de la mano. Hoy ya no estamos pero un día estuvimos, todo a cambiado para ambos. Ahora, a penas hablamos, a penas nos encontramos, a penas nos besamos... Me he dado cuenta de que no te cuide como debía pero si te ame como mejor sabía. Y no entiendo como aun me cuesta no quedarme mirándote fijamente. Tragarme la sonrisa de tonta enamorada para que no notes que aún mi corazón late por ti, aunque ahora más bien late por los recuerdos que dejaste sobre mi. Y es que esos recuerdos aún siguen vagando por mi mente pero no sin antes pasar por el corazón. Él aun te rec

Ver el infierno a través de sus ojos y el cielo a través de su boca.

Ella intentaba pasar por desapercibida por la vida, lo intentaba de verás pero no lo lograba.  Cada paso que daba era un paso en vano hacia el horizonte, hacia el más allá. Apretaba fuerte los dientes mientras de la mano caminaba con la inseguridad, tropezando pero nunca cayendo del todo. En sus ojos escondía el peor de los sentimientos guardados, escondía el miedo, la incertidumbre de ser descubierta le pasaba cada día factura por el cuerpo. Parecía tan tímida, tan buena. Parecer que verbo tan complicado.  Complicado como ella decía que era. Primeras impresiones se muestran, pocas de ellas acaban siendo ciertas.  La verdad es que a ella se le notaba el miedo con solo mirarla profundamente a los ojos. Se le notaba que no estaba bien, pero que aún así, ella seguía sonriendo como si todo estuviera perfecto aunque dentro de ella el mismísimo infierno reinaba en su cuerpo.

Escribir no es solo escribir

Y solo espero que esa inspiración que tenía vuelva, que una página en blanco no sea motivo de desesperación, y que las palabras vuelvan a fluir por mi corazón como por mis dedos con la misma ligereza que son escritas, que el amor por la escritura nunca quede en el olvido ya que lleno un hueco que estaba vacío. Y es que escribir no es solo escribir, no son solo palabras juntas para hacer una simple o compuesta oración. Es mucho, es mucho más eso. Escribir es amor por cada palabra, por cada significado que pueda tener, es emoción por lo que te puedan hacer sentir estas. Es amor propio a reflejar lo que tu interior siente en  un folio en blanco. Es ser abstracto ante la gente, ser complejo y respetar todas sus criticas, tanto buenas como dañinas. Escribir es dejar que tu corazón y tu mente se unan para dejar correr la libertad de tu sabiduría por tus manos hasta que acabe la sinceridad escrita como motivo del reflejo de tu alma. Pueden haber muchos temas sobre diferentes escritos, canc

Un final con principio.

Y entonces, supiste que era el final en el momento en el que él se giro y se despidió de ti. Sin saber cómo, sentiste que era un adiós pero no un simple adiós sino uno con los días contados para el fin. El final se acercaba para ambos, el final que acabaría con el "(no)s(otros)". Lo que no creíste es que acabaría así, sin más, tan rápido como si no hubierais sentido nada, tan rápido como los días de verano o quizás eres tú que te cuesta olvidar todo lo que un día vivieron, tan lento como el invierno frío. Quizás eso ya murió o esta muriendo pero cómo un sentimiento que fue tan real, tan fuerte que en cuestión de segundos muere tan rápidamente. Aun me lo sigo preguntando. No logró entender el cómo ni el por qué. Sé que debería de aceptarlo y no darle mas vueltas pero cuando algo importa, cuando algo te importa por mas mínimo o inmenso que pueda ser le intentas buscar una simple explicación para entender el porque de un final tan frío habiendo tanta historia increíble vivida

¿Por qué llegamos a perder el control sobre nosotros mismos?

Llegamos a perder el control de nosotros mismos cuando nuestro alrededor esta en total desiquilibrio, cuando algo no esta bien, cuando no sabemos que hacer y nos quedamos inmunes o simplemente cuando llegas al punto de como estabas al principio de todo, que te da igual las cosas. Te preocupas por lo exterior, que son los demás antes que por tu interior, que eres tú y eso al final es lo más importante. Retenemos el pasado y obtenemos exceso de futuro, olvidándonos así del presente. Nos sentimos con bastante frustración, con un vacío dentro de nosotros que no es capaz de llenar ni un cariño, ni la persona que queremos y muchísimo menos un objeto material. Empezamos a tener pesadillas constantemente todas las noches, pesadillas de las que nos hacen llorar o recordar a personas que a día de hoy no están en tu vida por alguna razón u otra y te duele, los ataques de ansiedad se intentan apoderar de ti y de tu cuerpo como antes lo intentaban pero no cedas, intenta respirar poco a poco aun

Mi ángel de la guarda, dedicado a Layla Larbi.

Lo cierto es que todos al menos una vez en la vida conocemos a alguien en no un buen momento que hace que nos encontremos, que volvamos a ser nosotros mismos, una persona con la que le podemos contar cualquier cosa que sabemos que no nos juzgará, con la que la sinceridad es la llave maestra para hablar de cualquier cosa y no sentirnos mal por ello. Bien, les voy a hablar de mi ángel de la guarda. Mi ángel está entre nosotros. Es una persona de carne y hueso.  A simple vista es una más en el mundo pero al menos no en el mío, no en mi mundo. Es una persona de las que ayuda, tanto como profesión como por gusto. Es de esas personas que tocan el corazón de verdad, que hacen que el alma sea completamente transparente y con la que e tenido una fuerte conexión que en pocas ocasiones e sentido. Empezaré explicando el por qué tu...Tú hiciste que en el peor momento me riera, que me riera por minutos cuando lo único que quería era estar hablando todo el rato sobre los estudios y mi frustración

Somos como queremos ser.

¿Alguna vez te has llegado a perder a ti mismo? No digo a un bajón de unos días ni a una decepción me refiero a meses o incluso años. Sientes que o el mundo no está echo para ti o tu no estas echo para el mundo, te haces mil preguntas sin encontrar ninguna respuesta coherente y acertada con la que puedas encontrar un por qué exacto a tus problemas, a el mundo, a tu alrededor y...¿por qué no una respuesta a ti misma? Nos pasamos la vida esperando cosas que quizás no lleguen jamás... o tan solo que quizás se demoren bastante en venir. Sin saber que la vida pasa, que el presente hay que disfrutarlo sin pensar las cosas dos veces porque cuando las pensamos nos cuestionamos a nosotros mismos y cuestionamos lo que queremos hacer. Si por ejemplo tienes ganas de leer, lee, no esperes a que el tiempo te ponga el libro en la mano. Eso jamás pasará.  Si quieres algo búscalo, no te quedes en el sillón de tu casa cada día esperando que el mundo cambie sin tu cambiar. Cuando uno cambia hace que el

1 palabra, 7 letras y una tilde...Ilusión.

El mundo está lleno de personas que han perdido la ilusión y lo peor es que han perdido la ilusión por aquello que les hacia felices, por lo que les gustaba, por lo que les hacia sentir satisfechos como seres. Y si pierden el interés en aquello que les gustaba, ¿ que les queda ? sienten un vacío tan grande como el mundo, así lo ven ellos, y así lo veía yo... hace meses atrás. Te sientes desilusionada, frustrada, más insegura que nunca antes, dudas de todos y sobretodo de ti, aun que a la vez tienes coraje, tienes irá, tienes impotencia, tienes esa clase de fuerza que si la utilizas acabas peor ya que haces daño a todo el que te rodea e inclusive a ti. Te sientes tan pequeña y no por los cm que te faltan de altura si no porque ves que el mundo se te cae encima y no puedes hacer nada o ¿sí? Hay gente que se queda esperando a algo o a alguien, en vez de pedir ayuda para volver a estar bien y por qué no, para estar mejor, otra que simplemente huye de los problemas metiéndose en más probl

¿Porqué tenemos que creer en nosotros mismos?

No tenemos que creer en nosotros mismos, debería de ser esencial hacerlo para así encontrar la plena felicidad dentro de cada uno. El creer o no creer es una confianza o desconfianza que tengamos hacia nosotros mismos, hacia nuestro entorno o familia. Podemos llegar a hablar de esa felicidad interior como una vela. La vela se apaga cada vez que hay un soplido o un fuerte viento, es decir cada vez que no creas en ti, que no confíes en ti esa vela no iluminará, no te iluminará, estarás totalmente perdido sin saber que poder hacer. Sin saber porque camino decidir ir.  Creer en ti es comprender que da igual el camino que puedas elegir, si es bueno disfrútalo, siente que lo mereces y aprovecha cada segundo que puedas pero si es todo lo contrario no te preocupes, lo tomarás como experiencia y tú yo interior crecerá más fuerte. A base de golpes se aprende, de palo tras palo. Cuando crees en ti ningún viento  ni huracán logrará apagar tu vela por muy fuerte que pueda ser. Porque esa

Porque todo tiene un principio y un final; DEP ABUELA.

¿Abuela? ¿Estas aquí? ¿Será cierto eso que dicen que si te hablará, me escucharías? Y quizás... ¿harías todo lo posible para yo darme cuenta de que sí me oyes? ¿Y si lo intento? Pero venga mujer valiente abre esos ojos color agua tan bonitos que tienes. Sonríe y has de este día de nubes un día radiante con la presencia de tu sonrisa. Esa sonrisa de la que muchos aquí en la tierra nos alimentamos; esa que hace un mal día se convierta en un buen día. Venga abuelita, que tú puedes. ¿Dónde están esos enfados? Si tú supieras que hoy no comí me pondrías un plato de tus croquetas, esas que me como si sólo son tuyas. Pero no se lo digas a mamá ¡eh!... que es un secreto entre tú y yo. Que la pobre bastante cansada está de mis manías con la comida. Pero... ¿si no tengo hambre que voy a hacer? Que lo sé abuela, estás cansada, pero aunque muchos no lo vean se nota que tienes ganas de seguir viviendo. Y esas, eran las ganas que me faltaban a mí para seguir teniendo ilusión por la vida, por